Creo que debo sumergirme en las aguas donde bebió Borges para saciar su sed de mundo..... Heráclito, De Quincey, Shopenahuer, Stevenson, Verlaine, Whitman, Miguel de Unamuno, Macedonio Fernández, Leopoldo Lugones, Berkeley, Haydeé Langue, Wells, Flaubert, Joseph Conrad, Pope, Salónica Macao, José Hernandez, Adolfo Bioy Casares.........Son los primeros círculos concéntricos que aparecen, en uno de sus libros recopilados, cuando lo ojeo y apoyo mis manos haciendo olas de derecha a izquierda......
Me gusta compartir su confesión "íntima y general", como él dice, en agradecimiento a su madre Leonor Acevedo: "ya que las cosas que le ocurren a un hombre les ocurren a todos".........
Sí, lo que le ocurre a uno le ocurre a todos.
ResponderEliminarPues si, son hermosos manantiales de algunos de los cuales aún no he probado sus aguas pero he aquí una buena guía. Y si, bajo muy distintas formas todos experimentamos las mismas vivencias esenciales...quizás porque mas allá de la aparente multitud somos Uno.
ResponderEliminar¡Qué ciertas son tus palabras!....Gracias por formar parte de éste viaje....Sé que llevas una mochila llena de poesía, cuando quieras convídanos, en el descanso, con alguna que desees compartir.....
ResponderEliminarSiempre he tenido sed de esos manantiales. Borges para mi es una asignatura pendiente. Gracias a vos me animare a asomarme y espiarlo un poco.
ResponderEliminarSolo he leído EL ALEPH pero el ver este blog me anima también a leer más cosas de Borges
ResponderEliminarSaludos
Antonino